Edición XXVII de Jazz al Parque: contraste y fusión de culturas

Este fin de semana el parque El Country fue el escenario de la XXVII edición del Festival Jazz al Parque, organizado por el Instituto Distrital de las Artes - Idartes, uno de los eventos más esperados por los amantes de la música en Bogotá. Durante sábado y domingo, 16 agrupaciones locales, nacionales e internacionales asombraron al público con una fusión única de culturas y sonidos, que demostró la versatilidad del jazz y su capacidad para trascender fronteras.

“Bogotá tuvo la oportunidad de experimentar y celebrar la diversidad cultural y musical del jazz. Esto promueve la inclusión y el intercambio cultural, enriqueciendo el tejido social de la ciudad. Festivales como este transforman los espacios públicos de Bogotá en lugares de encuentro y convivencia, fomentando la interacción social y el sentido de comunidad entre los asistentes”. afirmó María Claudia Parias, directora del Instituto Distrital de las Artes - Idartes. 

A lo largo del fin de semana, los asistentes disfrutaron de un espectáculo diverso, que fue transmitido a través de Canal Capital, canal oficial de los festivales Al Parque. El festival contó con la participación de destacados artistas como la cantante india Varijashree Venugopal, quien sorprendió a los asistentes con  su voz virtuosa y su interpretación e improvisación de estructuras melódicas complejas que combinaron el canto carnático de la India con el jazz. 

El toque ‘rumbero’ del festival llegó de la mano de los NY Gypsy All Stars, quienes llevaron al escenario una mezcla energética de sonidos balcánicos y gitanos con jazz contemporáneo, interpretando temas como Happy feet y Djobi djoba.

Por su parte, el virtuoso arpista colombiano Edmar Castañeda, que llevó su música a la película de Disney Encanto, y el armonicista suizo Grégoire Maret ofrecieron una presentación inolvidable protagonizada por el arpa llanera, modificada por Castañeda, y la armónica, instrumentos con los que  tocaron canciones del álbum Arpa Vs. Arpa. 

La escena local estuvo representada por ocho grupos distritales, como Harbey Urueña Quinteto, Cachicamo y Juan Romero Cuarteto, quienes dejaron en alto el nombre de Bogotá con su talento y propuestas innovadoras.

Otra de las artistas locales qué estuvo presente en el festival fue Lalo Cortés, quien afirmó que participar en la tarima de Jazz al Parque era una meta cumplida para ella. Luego de su presentación del domingo expresó “cumplí uno de los sueños más grandes de mi vida. Para mí es un privilegio haber podido estar en este escenario, al que me propuse llegar desde que era una adolescente”. 

Es así como la edición 27 de Jazz al Parque, más que un concierto, fue una experiencia musical. Así lo señalaron varios de sus asistentes, entre ellas Carolina Rodríguez: “Este festival me parece una oportunidad para reencontrar la música con el alma, encontrarse con amigos y estar con la naturaleza; me parece que es un espacio lleno de amor y me encanta”, Por su parte, Tania Hernández señaló que “Jazz al Parque es diferente dentro de todos los Al Parque, porque genera un espacio de juntanza que trae muchos movimientos culturales y lo más bonito es que todos disfrutamos independientemente de nuestro género favorito”. 

A pesar del frío y la lluvia que se presentaron durante los dos  días del festival, nada impidió que miles de bogotanos se congregaran para disfrutar del evento. Esta edición demostró una vez más la relevancia de Jazz al Parque como una plataforma cultural que promueve la diversidad musical y el encuentro de sonidos del mundo con la riqueza rítmica de Colombia.

Así, el festival siguió consolidándose como un espacio esencial para la escena jazzística de la ciudad, al mismo tiempo que aumenta el reconocimiento de Bogotá como una capital cultural de gran renombre en la región.

El festival en cifras

Paralelo a la programación musical, el festival ofreció a los asistentes varias experiencias. Por ejemplo, la Zona de Arte y Emprendimiento - ZAE, implementada en colaboración con la Secretaría de Desarrollo Económico del Distrito y su programa Hecho en Bogotá (en la que participaron 25 emprendedores y Artesanías de Colombia), que obtuvieron ganancias por más de 30 millones de pesos. También la carpa del programa Arte a la KY, contó con 17 artistas que en total recibieron ingresos por $1.000.000. 

De la misma manera, se entregaron de forma gratuita 2.200 ejemplares  de Libro al Viento, y 580 asistentes participaron de las experiencias de lectura, escritura y oralidad del picnic literario. La librería La Propia ganó $3.000.000.   

El festival contó también con una agenda académica dirigida no sólo a los músicos, sino al público en general, lo que representó para los capitalinos la posibilidad de interactuar con los artistas invitados, la promoción de nuevas audiencias para el jazz y el cultivo del gusto por la música en vivo y la cultura en comunidad.