Idartes celebra el Día Internacional de los Pueblos Indígenas

Idartes celebra el Día Internacional de los Pueblos Indígenas
El 13 de septiembre de 2007, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la denominada Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas del mundo, instrumento hito en cuanto a la cooperación y la solidaridad entre los pueblos indígenas existentes en el mundo y los Estados miembros de Naciones Unidas donde se establece un marco universal de estándares mínimos para la supervivencia, dignidad y bienestar de la población indígena en el mundo, y donde se instituye cada 9 de agosto como Día Internacional de los Pueblos Indígenas.
Se definen como pueblos indígenas en Colombia a los grupos o familias de ascendencia amerindia (origen americano o continental), que tienen conciencia de identidad colectiva entre sus integrantes y comparten valores, rasgos, usos o costumbres que se enmarcan en su cultura, así como formas de gobierno, gestión, control social o sistemas normativos propios que los distinguen de otros grupos poblaciones y otras comunidades.
En el caso bogotano, los pueblos y comunidades indígenas residentes en la ciudad se organizan en entidades públicas especiales o cabildos, cuyos integrantes son miembros de estos sujetos colectivos, elegidos y reconocidos por la comunidad.
En la actualidad la Administración Distrital reconoce a cuatro de estos cabildos -Cabildo Mhuysqa de Bosa, Cabildo Mhuysqa de Suba, Cabildo Mayor Indígena Kichwa, Cabildo Indígena Inga, Cabildo Ambiká Pijao-, se encuentran en proceso de reconocimiento otras diez formas organizativas en Bogotá -Cabildo Indígena Misak, Cabildo Indígena Nasa, Cabildo Indígena Pasto, Cabildo Indígena Yanacona, Cabildo Indígena Kamentsá Biyá, Cabildo Indígena Uitoto, Cabildo Indígena Tubú, Cabildo Indígena Wounaan Nonam y Cabildo Indígena Eperara Siapidara-, reconociendo de todas estas catorce formas organizativas, la historia del pueblo indígena muisca asociada con el territorio de la actual Bogotá, específicamente con el territorio conocido como Bosa, toponímico que traduce número dos en mhuysqa.
Originalmente el asentamiento muisca prehispánico de Bosa hizo parte del cacicazgo regional de Bacatá, cacicazgo cuya sede de gobierno se ubicó en Funza y que en extensión y población representó la entidad política centralizada más amplia, no sólo del territorio muisca, sino de todo el norte de Suramérica entre los siglos XV y XVI. Su gobernante, el Zipa, había anexado en el siglo XVI los cacicazgos intermedios de Guatavita, Ubaque, Zipaquirá y Fusagasugá, lo que lo hacía una entidad política amplia pero inestable, lo que fue aprovechado por los conquistadores españoles zanjando alianzas con los cacicazgos opositores a la unidad establecida por el Zipa y el mítico cacique de Techotiva de Bosa, ancestro de los actuales muiscas de apellidos Neuta, Chiguazuque, Tunjo u Orabajo.
En homenaje a este día y especialmente al reconocimiento de Bogotá como una ciudad con origen indígena, el Instituto Distrital de las Artes - Idartes, publica en sus redes un cartel conmemorativo que además de rememorar esta importante fecha, hace memoria y recurre a la cosmología indígena andino - amazónica que recuerda a este territorio como la tierra del cóndor, espíritu de mundo que se asienta en la cima de los Cerros Orientales, reconociendo un vasto territorio que no solo se circunscribe a la actual Bogotá urbana, sino a la zona rural ampliada que constituiría algo así como la Sabana de Bacatá. No en vano en la lengua quechua todo el extenso territorio de lo que ahora es gran parte del territorio de Cundinamarca se denominó Kundurimarka o “Tierra del cóndor”.
Con esta imagen el Idartes hace apertura a la convocatoria de tres (3) nuevos apoyos a iniciativas artísticas indígenas residentes en Bogotá que próximamente serán divulgadas, así como se anuncia el desarrollo del Diplomado Cuerpo Ancestral – Muisca con el que se busca cocrear de manera conjunta el ensamble a través del cual se quiere generar conocimiento y reflexión en torno al proceso histórico que se remonta a la presencia de cazadores recolectores en el actual territorio, de conformación y consolidación de la sociedad muisca compuesta por cacicazgos, de represión, mestizaje y asimilación cultural de las épocas de Conquista y Colonia, de desarticulación de su territorio y adopción de una forma de vida campesina en el siglo XIX con la República y de proletarización del campo y crecimiento de una ciudad que absorbió los territorios tradicionales de cacicazgo como parte del casco urbano, sobreviviendo gracias a una conciencia y vida colectiva dinamizada por el Cabildo, el cual siguió funcionando silenciosamente hasta nuestros días.
El mantenimiento de esta conciencia territorial es la que fundamenta que este sujeto colectivo étnico haya logrado el acuerdo entre el Distrito y el Cabildo que permitirá modificar y adelantar el desarrollo del Plan parcial El Edén - El Descanso, realizando diversas obras para la actual localidad de Bosa, respetando el equilibrio con las tradiciones indígenas que habitan en este sector y reconociendo como propiedad colectiva al Cabildo Indígena Muisca de Bosa 3,17 hectáreas para que construyan 550 viviendas indígenas que serán gestionadas por el propio cabildo.
El Idartes se une hoy a la celebración del Día Internacional de los Pueblos Indígenas y también al logro de estos acuerdos alcanzados por la comunidad indígena de Bosa, dado que representa la primera consulta previa realizada con un colectivo indígena asentado en contexto urbano, y por supuesto, desde el Instituto generamos acciones que desde el arte revive la memoria Mhuysqa de los comuneros con un proceso de formación y cocreación en el que participan comuneros del cabildo y donde la trama musical, literaria y escénica de la obra girará en torno a sus recuerdos, a su imaginación, a la tradición y al interés de reivindicar a Bogotá como una ciudad con pasado y presente indígena.
Texto por: Carmen Susana Tapia