Rita Indiana

Rita Indiana: "Los varones están al mando todavía"

La artista se presentó este 30 de junio en Rock al Parque 2019, el mismo día de la Marcha LGBTI en Bogotá.

Diez años tuvo que esperar el público bogotano para ver a la dominicana Rita Indiana en un escenario de Rock al Parque. Chucky García, programador artístico del festival, logró sacarla de Puerto Rico, con la intervención de una bruja, bromea ella, para convencerla de cerrar el segundo día del escenario Lago en la celebración de los 25 años del evento. 

Rita Indiana, escritora, compositora y cantante, abrió el concierto con su versión de Dulces sueños homenajeando de cierta manera a otra gran cantante, Annie Lennox, con quién comparte además una cierta estética andrógina. La Mostra, como la llaman sus fans en el Caribe, fue primero escritora y por otra ficción, como dijo en entrevista con Carolina Sanín cuando fue invitada a la Feria del Libro en 2015, armó una banda, se disfrazó de cantante popular y tuvo tal éxito con su Pieza de performance art que se le salió de las manos y casi la vuelve loca.

Se retiró de la música y ahora vive con su esposa en Puerto Rico dedicada a sus proyectos literarios. Sin embargo, Rita Indiana regresó a la música y en 2017 grabó El castigador, un tema que alude a la sempiterna corrupción de los gobiernos latinoamericanos. Tiene en proyecto grabar un disco con el maestro Tito Matos, percusionista puertorriqueño especializado en la plena y con la colaboración de El Comité, la agrupación con la que se presentó en Bogotá.

En Rock al Parque, Rita continuó el concierto con su conocido ritmo de merengue electrónico mezclado con rock y otros ritmos caribeños. Entre sus éxitos más conocidos cantó La jardinera y Equeibol. Pero sus canciones, con ese frenético ritmo que pone a todos a bailar, contienen además una crítica seria y hacen referencia a los temas sociales que la apasionan.

Les cantó a los niños enjaulados y separados de sus familias por el gobierno estadounidense con una canción que cuenta la típica historia del inmigrante que deja a su esposa, hijos y mamá para irse al norte a conseguir el dinero con que mantenerlos. Cerró el concierto con Guasábara una palabra de los taínos, que significa grito guerrero, explicando que a pesar de haber sido diezmados por la colonización, estos pobladores indígenas del Caribe no fueron del todo extinguidos como cuentan los libros de historia.  

En uno de los momentos más emotivos del concierto, Rita agitaba la bandera gay que le entregaron desde el público mientras presentaba la canción El blue del ping pong y contaba que la escribió para su esposa como “una balada romántica”, quizás su canción más famosa que puso a todo el público a saltar en este día que coincidió con la Marcha LGBT  en Bogotá.

 

Rita Indiana: a favor de los derechos humanos

Marcha LGBT

 

En rueda de prensa, Rita Indiana profundizó sobre su activismo LGBTI diciendo “son liderazgos que uno no elige, que lo eligen a uno, la condición de homosexual en mi vida ha sido una cosa con la que nací y ya luego con el trabajo que uno hace, escoge la bandera que uno quiere ondear y ya ahí se decide ser una parte de la lucha”.

También contó “mi adolescencia la viví en los 90 cuando esto no era una cosa tan común en Latinoamérica, por lo menos en Santo Domingo ya hay un pride súper grande también. Para mi es súper emocionante, súper lindo ver adolescentes de 14, 15 años viviendo su sexualidad de una forma abierta, bonita, celebrándola”.

Cuando se le preguntó sobre los avances que ha tenido la comunidad LGBTI a los 50 años de Stonewall, la artista explicó: “creo que se ha avanzado bastante, pero falta mucho. La cuestión de los derechos civiles es una lucha constante y es una lucha que va a durar muchísimo más porque hay mucho camino por andar, muchas cosas que todavía tenemos que conquistar, sobre todo porque podemos vivir una realidad aquí, pero por ejemplo, en el Oriente Medio es otra realidad, es una cosa que toca hacerla más global y pensar en los que no están en nuestra situación privilegiada, ósea que falta un montón”.

Además de los derechos LGBT, otra preocupación de esta cantante es el papel de la mujer en la industria: “Es importante porque somos la mitad del mundo, en el hotel en el que nos estamos quedando es un reguero de machos... Yo entiendo que hay un tema de oportunidad también, pero depende de nosotras, tenemos que salir a buscárnosla con el machete en la boca y darle pa allá a los proyectos, a los trabajos, sin miedos darle para allá, si tenemos esa iniciativa creativa darle pa allá con el trabajo. Siempre va a ver un estúpido que va a decir alguna estupidez o que te va a querer a tronchar el camino, hay que aprender con eso también, hay que aprender a lidiar con esa oposición y con la presión de que el mundo lo hicieron los varones y ellos están al mando todavía y estamos en ese struggle [lucha], pero esto está cambiando ya”.

Rita Indiana agradeció al público bogotano y afirmó que es feliz en Colombia y en Bogotá, lugar al que considera parte del Caribe continental.