Thierry Arbogast revela sus secretos
Thierry Arbogast revela sus secretos
Al regresar de hacer las compras de provisiones para su hogar, Mathilda, de 12 años, se da cuenta que su familia ha sido vilmente asesinada por extraños hombres que vigilan el pasillo y sigue derecho hacia otro apartamento en busca de refugio. Después de golpear la puerta incesantemente, esta se abre y su rostro es iluminado por la esperanza de sobrevivir.
Esta escena de la película El profesional (Léon), que genera bastante angustia entre los espectadores, fue creada por el director de fotografía Thierry Arbogast, quien aseguró que “para este plano se hizo una bandera que permitiera acentuar el dramatismo que se requería en ese momento. En realidad, fue una propuesta que ejecuté junto con la genialidad que caracteriza al director de este film, Luc Besson, quien me permitió participar en una de las mejores películas que he hecho en mi carrera”.
El fotógrafo francés, ganador del Premio César a la Mejor Fotografía en varias oportunidades, comentó que para esta producción particularmente, él propuso rodar los interiores en un estudio en París, pues además de ahorrarse los altos costos de filmar en Nueva York, podrían controlar mucho mejor la iluminación y, por ende, los tiempos de rodaje serían más flexibles.
No obstante, Thierry, quien ha participado en más de 40 películas como Lucy, El quinto elemento y Los ríos de color púrpura, explica que la clave en su trabajo ha sido entender lo que el director quiere. “Durante mi carrera he trabajado en diferentes tipos de locaciones, en películas de varios géneros y bajo todo tipo de desafíos, pero mi secreto ha sido analizar y ejecutar lo que quiere el director y adaptarme a su forma de hacer las cosas. Luc, por ejemplo, no da mucho tiempo para analizar temas técnicos, entonces hay que ir a su ritmo, mientras que Jean-Paul Rappeneau, director de El húsar en el tejado, deja que te tomes tu tiempo para preparar mejor la la luz y otro tipo de detalles que me gusta tener en cuenta para evitar, en la medida de lo posible, los trucos digitales. Para esto uno de mis secretos es poner muchas lámparas en la escenografía”.
El parisino de 75 años también reveló la interesante anécdota de cómo se conoció con Luc Besson: "él hizo un casting de directores de fotografía antes de filmar El profesional y yo fui el último de la lista. Ahí me preguntaron si me molestaba que el director encuadrara y si tenía algún problema con que él escogiera el equipo técnico, a lo que respondí que no, y por ello decidieron contratarme". Lo anterior da cuenta de su flexible forma de trabajar y de lo rápido que puede adaptarse a diferentes contextos, convirtiéndolo en un intrépido de la fotografía que ha sido capaz de trabajar con diferentes directores como Emir Kusturica, Brian de Palma o Mathieu Kassovitz, entre muchos otros
“La fotografía en el cine ha sido mi pasión desde siempre; fue un sueño que tuve desde la infancia, lo cultivé y trabajé duro por hacerlo realidad. Por eso, hoy puedo decirles a todos que nunca debemos rendirnos, debemos perseverar y ojalá encontrar a la persona correcta que nos dé un impulso, como me pasó con directores como Luc, un director fantástico que me dio grandes oportunidades”, concluyó Thierry Arbogast,
quien en el marco de la masterclass que dio el sábado 9 de abril en la Sala Capital de la Cinemateca de Bogotá recalcó que la clave de un buen director de fotografía está en el trabajo en equipo y en ir todos al mismo ritmo.
Sobre esta masterclass, Ricardo Cantor Bossa, gerente de Artes Audiovisuales del Instituto Distrital de las Artes- Idartes señala que “ las cinematecas son lugares para ver películas, pero también para conversar sobre el cine, para reflexionar y aprender. Y esto es posible no solamente a través de la visualización de obras sino en diálogo con quienes se dedican al quehacer audiovisual, así que esta clase magistral nos permitió tener un diálogo directo en un viaje a través de sus películas con Thierry Arbogast en su carrera como director de fotografía”.
Así, Arbogast se despidió de Colombia y de Bogotá, donde estuvo los últimos meses participando en la grabación de la película Freelance, que tuvo como locación a la capital del país, labor que se logró gracias al apoyo de la Comisión Fílmica de Bogotá,