Planear para millones de personas suele tener sus dificultades. Muy seguramente, en estos momentos, los organizadores del Mundial de Fútbol Qatar 2022, tienen su sistema nervioso un tanto alterado; o los productores de los grandes festivales mundiales como el Tomorrowland o el Carnaval de Río de Janeiro, cuando entran a escena.   Caso similar el de los asesores de las campañas presidenciales que vivimos hace unos meses. 

Claro está, que planear la vida de 40 millones de colombianos en todos sus tópicos debe generar algún grado de estrés; pero planear sobre uno de tantos tiene sus ventajas, más si se trata de una pasión en particular, en una ciudad especial como Bogotá.

El arte y la cultura han sido la razón por la cual planear para los bogotanos ha significado la mejor elección. Saber que estas dos manifestaciones tienen presente y futuro gracias a la gestión realizada, que ha sabido balancear el potencial humano y artístico en pro del desarrollo de la ciudad, la solidaridad, la creatividad e innovación, el emprendimiento, el apoyo constante a la ciudadanía y las muchas oportunidades que hemos proporcionado desde el Idartes con responsabilidad social, entre otros; nos consolidan como los líderes en la cultura en la capital y en el país. 

Logramos enfrentar y salir adelante con uno de los mayores retos que la humanidad ha vivido por la pandemia debido al COVID 19, creando nuevos programas y fortaleciendo los existentes, que lograron preservar la cultura y hacerla florecer, entrando a los hogares de los bogotanos y de los ciudadanos del mundo y fortaleciendo la identidad y la cohesión entre la comunidad a partir de las artes. 

Nacieron programas como Idartes en casa, una plataforma que centralizó, por medio de archivos de contenido multimedia, la oferta cultural de la ciudad. Es Cultura Local, una estrategia que surgió para promover la reactivación económica del sector cultural y creativo de Bogotá. Al igual Arte a la KY, un programa de circulación artística en las calles de Bogotá. Respira El Arte, una red de escenarios sustentables en la ciudad.  

Logramos fortalecer y darle mayor alcance a los Crea y al Programa Nidos, a través de convenios con organizaciones culturales nacionales e internacionales, entre muchos otros programas que robustecieron el emprendimiento y contribuyeron con el mejoramiento de la calidad de vida de la ciudadanía, a partir del arte y la cultura.

Después de dos años de ausencia, entramos con toda la fuerza y energía al finalizar la pandemia con el relanzamiento de los Festivales al Parque, y logramos reunir a más de quinientos mil bogotanos, colombianos y ciudadanos del mundo en torno a la música, la tolerancia y el respeto, en Colombia, Salsa y Hip Hop al Parque, marcando la diferencia con otros grandes eventos que se realizan a nivel mundial. Y aún hay más, en el mes de septiembre vamos con Jazz al Parque y cerramos el año con Rock al Parque.

Salimos a las calles “a la caza de periodistas culturales”, con MANADA, un proyecto convertido en una firme realidad, dirigido a las nuevas generaciones de periodistas que viven y sienten la cultura con pasión, y que cuentan las historias que genera la comunidad desde sus localidades, con el deseo de que sean conocidas y valoradas; sacamos adelante dos promociones… y sabemos que vendrán muchas más.

Celebramos los 10 años del Instituto de cara al futuro y dejamos las bases de los años venideros con un Idartes listo para los nuevos retos de la modernidad. De igual forma edificamos redes, en un mundo cada vez más globalizado, a través del programa de Internacionalización Una Ventana al Mundo. Así mismo, con el carácter y la pasión que nos caracteriza, conseguimos favorecer el patrimonio cultural material, con la remodelación de dos teatros íconos de la cultura en la capital, Teatro El Parque y Teatro San Jorge; y la creación del Teatro El Ensueño en la localidad de Ciudad Bolívar.

Nos mantuvimos, apoyamos y consolidamos la igualdad y diversidad de género en el escenario cultural en Bogotá, en cuanto a la correspondencia a los recursos, representaciones, eventos, convocatorias y en general a todos los beneficios que ofrecen las artes, para las mujeres y población LGBTIQ+. 

Nuestros escenarios siempre estuvieron abiertos, y siempre lo estarán, para darle paso a todas las representaciones artísticas, que consoliden a Bogotá como protagonista en las artes y la cultura en Colombia y el mundo.