Vivir entre las nubes
En la localidad de San Cristóbal, a 3036 metros sobre el nivel del mar, se erige el Centro de Formación Crea Entre Nubes, un lugar que parece flotar en el cielo, donde los sueños y la creatividad se entrelazan gracias a los talleres de formación artística que Instituto Distrital de las Artes – Idartes a través del Programa Crea ofrece allí. Este rincón, elevado literalmente entre las nubes, se ha convertido en un espacio para que las familias compartan, aprendan y crezcan juntas a través del arte.
Mayle Edith Lugo Valencia, una niña de nueve años, muestra con orgullo su última creación: un dispositivo óptico en el que dibujó el mar con la luna, la Torre Eiffel y una persona subiendo una escalera. Mientras incluye trazos de un gato, cuenta con entusiasmo cómo la profesora les entregó cartón paja para recortar círculos y comenzar a dibujar. “Lo que más me gusta de venir acá es la profe, porque ella juega con nosotros y nos hace retos”, dice Mayle, resaltando la dinámica participativa que hace de cada clase una aventura. Mayle asiste los miércoles y viernes, y no duda en invitar a otros a unirse a esta experiencia: “Las personas que no conocen al Crea, se están perdiendo de algo maravilloso, por favor vengan”.
El entusiasmo de Mayle es compartido por Matías Zárate Núñez, de diez años, quien descubrió el Crea gracias a sus primos. “Ellos dijeron: vamos a ir al Crea, y yo dije: ¿pero qué es el Crea? y ahí fue que me enteré que acá dan artes plásticas, música, danzas, artes electrónicas…”. Así, inspirado por sus familiares, comenzó a asistir al taller de artes plásticas, aunque no duda en admitir que su verdadera pasión es la música y que aprovechará la oferta del Programa Crea para cambiarse próximamente al taller de música, “yo tengo una guitarra y me ha dado mucho ánimo estar con ese instrumento, por eso quiero estar en el otro taller”, admite.
Fray Mar Vidales, una de las primas que lo invitó al Centro de Formación y que comparte con él en el taller, añade que pese a que la pasión de su familiar no eran las artes plásticas, el tiempo que ha experimentado con este lenguaje, lo ha llevado a descubrir habilidades. “A mí me ha gustado que él esté acá porque he aprendido muchas cosas, ha aprendido a pintar, por ejemplo”, dice.
Y es que, la joven de once años, reconoce cómo los talleres del Programa Crea ayudan a mejorar significativamente las habilidades artísticas de los participantes. “Yo he aprendido a dibujar, antes no sabía mucho pero ahora me parece más fácil”, sentencia Fray Mar.
Su hermano Fray Vidales, que hace parte del taller de música, cuenta cómo descubrieron que el Instituto Distrital de las Artes – Idartes tenía talleres de formación gratuitos: “Yo vengo a un comedor que está acá abajito, entonces vi el cartel que estaba ahí. Le dije a mi mamá que me metiera”, recuerda. Desde entonces, Fray Vidales ha mejorado su técnica en la batería y en artes plásticas. Para Fray, es vital tener un espacio donde estar con su hermana: “No andamos como algunos niños que andan en la calle así sueltos, sino que estamos aquí aprendiendo cosas nuevas”.
Larry Gil Vásquez, de quince años, tiene una historia similar y también ha encontrado en el Crea un lugar especial. Él llegó al Crea por una iniciativa de su madre, “Fue por mi madre, porque ella estuvo aquí en una reunión y me dijo que le parecería chévere que yo practicara más con el piano”, explica. Hacía tiempo que no tocaba y su madre vio en el Crea una oportunidad para que retomara su pasión. Pero la decisión no solo involucraba a Larry; su madre también inscribió a su hermanito Joan en los talleres de artes plásticas. “No querían que estuviera todo el tiempo en la casa sin hacer nada, sino que viniera a hacer otro tipo de actividades”, comenta Larry. Esta decisión conjunta permitió a los hermanos compartir un espacio de aprendizaje y crecimiento.
Los Centros de Formación Crea son mucho más que un lugar para desarrollar habilidades artísticas; son un refugio donde las familias pueden compartir experiencias y fortalecer sus lazos. Quienes deseen hacer parte del Programa Crea pueden dirigirse a cualquiera de los 20 espacios donde la imaginación no tiene límites.