¿Concursar o no? Dos ganadores de estímulos cuentan su experiencia

“Yo no he necesitado escribir muchas cosas en las propuestas que presento, sino ser concreto y explicar muy claramente qué vamos a hacer y cómo pensamos hacerlo.” Hildo Ariel Aguirre.

Hildo Ariel Aguirre es arpista, licenciado en música, gestor cultural y director de la Academia Llano y Joropo, que tiene más de 30 años de existencia. Desde el año 2014 organiza el Encuentro Internacional Maestros del Arpa, proyecto que ha sido apoyado a través del Programa Distrital de Apoyos Concertados.   

Hildo, ¿cómo ha sido su experiencia participando en los programas de Estímulos y Apoyos? 

En un comienzo no nos metíamos mucho. Pero desde el 2013 empezamos a participar y con la Academia nos ganamos una convocatoria que se llamaba Estrategias Digitales, con la que se estructuró la fase inicial del proyecto de escuela virtual y que ahora con la cuarentena cobró bastante fuerza. En 2015 nos presentamos con el Encuentro Internacional de Maestros del Arpa a Apoyos concertados y desde esa fecha hemos sido ganadores. 

¿Qué ha significado para su proyecto participar en el Programa Distrital de Apoyos Concertados?

No podemos desconocer que año tras año nosotros esperamos contar con el apalancamiento de la Secretaría de Cultura y del Idartes para hacer el Encuentro. Y aunque es una convocatoria en la que bien podríamos quedar por fuera, con el tiempo nos hemos fortalecido como organización y hemos posicionado el proyecto. La ayuda es bastante significativa. Tanto que para este año fue lo que salvó nuestro proyecto. 

¿Cómo les fue este año?

Fue nuestra primera experiencia a nivel virtual. Tuvimos muchos nervios porque no sabíamos cómo iba a reaccionar el público. Pero lo que pensamos se quedó corto con lo que logramos, puesto que nosotros aspirábamos a alcanzar 20.000 asistentes y los reportes nos mostraron que llegamos a 300.000 personas. Superamos todas las expectativas y fue muy importante saber que el Encuentro se conoció en otros países y en regiones apartadas del país.  

¿Cuál es la “fórmula” para ganar en los Programas de Fomento? 

Tanto como fórmula, no. Pero una de las cosas que los jurados revisan en los proyectos es la capacidad de gestión. Al jurado no le convence el hecho de que un proyecto dependa totalmente del recurso que se solicita. Nosotros, por ejemplo, solicitamos más o menos el 15% del valor total del Encuentro. También es importante demostrar el impacto en la divulgación y esto se logra con alianzas. Finalmente, no he necesitado escribir muchas cosas en las propuestas que presento, sino ser concreto y explicar muy claramente qué vamos a hacer y cómo pensamos hacerlo.

Conozca más del maestro Hildo Arial Aguirre en este enlace. 

“Con Giras por Bogotá aprendimos a hacer autogestión. Nos tocó hablar con la gente de los espacios, hacer la logística, la promoción, la producción y garantizar que todo funcionara. Entonces, más allá de lo musical, se fortalecieron otros aspectos del grupo”.  Giovanna Mogollón León.

Giovanna Mogollón León es socióloga, música y gestora cultural. Ha pertenecido a varias agrupaciones de gaitas y tambores en Bogotá. Actualmente es integrante y percusionista de La Rueda y de La Sonora Mazurén, agrupaciones con las que ha ganado diferentes becas y premios de estímulos. 

¿Qué la ha motivado a participar en los Estímulos y el Banco de Jurados?

Creo que estos programas ayudan a la consolidación de los proyectos musicales, porque le enseñan a uno qué elementos se necesitan para tener una banda profesional. Cuando te presentas a una beca te das cuenta que necesitas material especializado y que, por ejemplo, debes tener un press kit, fotos, un buen video, etc.  Además, no siempre cuentas con recursos propios o con la opción de que te presten dinero o te financien los proyectos. Entonces, aplicar a esta clase de estímulos ayuda en la parte económica y si uno es inteligente se puede manejar el presupuesto y hacer varias cosas que ayudan a que el proyecto crezca y se fortalezca. 

Con Giras por Bogotá aprendimos a hacer autogestión. Nos tocó hablar con la gente de los espacios, hacer la logística, la promoción, la producción y garantizar que todo funcionara. Entonces, más allá de lo musical, se fortalecieron otros aspectos del grupo. También ganamos Giras Internacionales y esto nos permitió hacer una gira por EEUU y presentarnos en un festival que fue muy importante para la proyección internacional de La Perla.

Por otra parte, ser jurado del Banco me ha permitido saber cómo están viéndose las bandas: qué sueños y qué proyectos tienen en la cabeza. Es una gran posibilidad para leer otros proyectos y tener una mirada panorámica de la escena musical bogotana. También me ha permitido ver las falencias que aún tienen los músicos y sus dificultades en la escritura de proyectos. Esto es algo que debe trabajarse aún más.

¿Cuál consideras ha sido el aporte más significativo de estos programas?

En el caso del Banco de Jurados ha sido tener la posibilidad de escuchar a otros y conocer otras opiniones. Pero, sobre todo, creo que estos programas ayudan a fortalecer el pensamiento colaborativo. En nuestro caso hemos ampliado la red de contactos y de trabajo, en la que no sólo nos beneficiamos nosotras sino también otras personas como videógrafos, ingenieros de sonido, fotógrafos, etc. 

¿Qué le recomendarías a quienes no han participado en estos programas?

Tal vez hay mucho desconocimiento de estos programas, lo que hace que muchas personas sientan que no están incluidas. También hay personas a las que definitivamente nos les gusta participar en cosas institucionales. La recomendación es que entren a la plataforma y la conozcan. Que si tienen dudas hagan sus consultas por los canales que están allí. En mi caso siempre me han respondido eficazmente. También valdría la pena que Idartes haga charlas sobre cómo estructurar las propuestas, para aquellos para quienes esto no es fácil.

En este link puede encontrar más de Giovanna Mogollón León.