Si hay algo que disfruto de mi trabajo es participar en cada una de las actividades que realizamos en las localidades de Bogotá. En mis recorridos he conocido cientos de historias de personas que descubren en el arte un propósito de vida.

Por eso, el reconocimiento que recibió Bogotá hace una semana, otorgado por la Red de Ciudades Creativas de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura – UNESCO, como ejemplo para la reactivación a través de la cultura y la creatividad, gracias al desarrollo del Programa Es Cultura Local, me llena de orgullo y es una muestra de que las historias locales de esta Bogotá vibrante han hecho eco en otras latitudes.

A propósito de la honrosa mención, quise conocer un poco más de las personas que hacen posible este viaje de historias locales. En mi búsqueda me encontré con Cacofonías, un proyecto cultural que lleva más de 4 años narrando la visión local y las experiencias artísticas que se tejen en las calles de la localidad de Fontibón.

“Qué mejor que una lectura para un viaje largo en avión. Qué mejor que una experiencia estética que nos devuelva a esos lugares que tantos buenos recuerdos nos evocan. Qué mejor que ir a otros lugares a través de lecturas, de imágenes de arte. Qué mejor que encontrar la ruta perfecta que nos lleve al destino soñado”, dice Tony Beltrán, coordinador de este proyecto ganador de la beca Es Cultura Local, este año.

Después de recibir la buena noticia de ser uno de los 44 ganadores de la beca Es Cultura Local, entregados en la localidad de Fontibón por parte del Idartes, Tony, junto con su compañera de viaje, Carolina Corredor, se dieron a la tarea de convocar a la mayor cantidad posible de artistas y emprendimientos para la publicación de la revista Cacofonías ‘Historias Locales’ y la producción de cuatro eventos presenciales y dos virtuales incorporados en la propuesta que los hizo merecedores del estímulo económico que entregó nuestra institución.

La juventud de Tony y Carolina contrasta con la madurez con la que encararon este proyecto y las ganas de apoyar con decidida convicción los emprendimientos de los 69 beneficiarios directos con quienes compartieron la beca. A esta cifra se suman los más de 68 mil ciudadanos que participaron en los eventos virtuales y presenciales.

“Este proyecto nos permitió descubrir que nuestra localidad está llena de artistas, de personas que resistieron y descubrieron en la pandemia una oportunidad para sacar provecho de sus habilidades artísticas. Este es el momento de conocernos, de saber qué hacen nuestros vecinos y de apoyarnos mutuamente”, cuenta Carolina mientras orgullosa muestra los productos de los emprendedores, el kit que recibieron sus beneficiarios y la revista Cacofonías.

Por esto, por historias como las de Carolina y Tony es que seguimos apostándole a la reactivación del ecosistema artístico y cultural en Bogotá con proyectos como Es Cultura Local. Apoyemos y fomentemos el arte local -#ArteLocal-, sigamos descubriendo la magia que habita en las esquinas de los barrios, en cada uno de sus espacios y en los hogares de nuestra comunidad.

Catalina Valencia Tobón