Hombre disfrazado cantando y tocando guitarra
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Puerto Candelaria le canta a los bichos raros

Con La sinfonía de los bichos la agrupación colombiana busca rendir un homenaje a la diferencia.

Música, teatro, danza y ciencia se unen en un gran espectáculo en el que la diferencia es la protagonista. La sinfonía de los bichos raros es la nueva apuesta de la agrupación colombiana Puerto Candelaria, un musical nominado a los Premios Grammy que promueve el respeto por los demás y que se presentará el 29 y 30 de octubre a las 4:00 p.m. en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán y en el Teatro El Ensueño, respectivamente. 

Este álbum, cuyas canciones se compusieron con la asesoría de la científica colombiana Elisa Chaparro, PhD. Bióloga de la Universidad de Los Andes, es una metáfora con la que la banda llama la atención sobre cómo la sociedad rechaza e hiere a quienes no se acomodan a sus estándares de comportamiento. Así lo explica Sofía Carvalho, directora creativa del show  junto con Juancho Valencia, quien señala que “con este musical juntamos varias cosas que nos han apasionado, como es el hecho de construir sociedad a través de la música, pues buscamos que la diversidad entre las personas sea abrazada y respetada. Para ello, vamos a contar la historia de una pandilla de bichos que quiere presentarse en un reality show de humanos, el cual pretenden conquistar  con sus talentos especiales”. 

Para Mauricio Galeano, director del Instituto Distrital de las Artes - Idartes este “será un evento imperdible, pues unirá varias disciplinas como la música, el teatro, el juego de luces y otros que permitirán que Puerto Candelaria muestre, uno a uno, esos animales a los que les tememos o nos desagradan como la Mariposa Negra, el Ciempiés, el Chulo, la serpiente, la araña, la cucaracha, entre otros, los cuales contarán historias sobre esas características que los hacen únicos y relevantes para los ecosistemas”.

El público objetivo de esta sinfonía son los niños y las niñas, con quienes, dice Carvalho, la agrupación tenía una deuda. “Los pequeños siempre nos han seguido, se han conectado con los ritmos y han entendido, a veces mejor que los adultos, los mensajes que tiene Puerto Candelaria; son seres sin ningún prejuicio, que escuchan abiertamente, que no tienen miedo a las cosas diferentes ni miedo a moverse o a cantar. Y con este álbum saldamos la deuda con ellos, una audiencia con la que esperamos tener una relación cercana”. 

De esta manera, la directora creativa hace una invitación  a las familias para que no se pierdan este musical en el que los animales raros cobrarán vida propia. “Los niños y las niñas  van a querer pararse desde la canción uno hasta el final; será  una descarga de energía muy linda que, además, le dará al público la oportunidad de compartir con los músicos al finalizar la presentación”.