Integrantes de Alcolirykoz en la tarima del Jorge Eliécer Gaitán

El hip hop de Alcolirykoz llenó en el Jorge Eliécer Gaitán

El grupo paisa hizo historia.

La hermandad del movimiento hip hop se sintió en el recinto. Los fanáticos de Alcolirykoz acompañaron el primer concierto de la franja Colombia del año que allí se llevaba a cabo.

Desde la tarde, llegaron uno a uno los integrantes del gran colectivo de artistas que acompañan al grupo. Músicos, técnicos, fotógrafos y videógrafos viajaron desde Medellín para unirse al resto de la familia, que reside en Bogotá y que se ha convertido en su segundo hogar.

‘Fazeta’, ‘Kaztro’ y ‘Gambeta’ parecían nerviosos desde la prueba de sonido. Este era el concierto más grande que habían dado hasta ahora en la ciudad, al menos siendo ellos los protagonistas.

Como buenos anfitriones y sin faltar a la costumbre de hermandad en el hip hop, invitaron a algunos artistas emergentes a abrir su espectáculo para que pudieran mostrarse ante un público de más de 1.600 personas amantes del movimiento.

Hacia las cinco de la tarde, los seguidores esperaban ansiosos bajo la llovizna, la apertura de puertas. Venía una jornada larga en el Teatro. Había jóvenes y adultos por encima de sus treinta con hijos a bordo, muchos con camisetas que demostraban el nivel de afición a Alcolirykoz.

A las 7:00 p.m., ya con bastantes personas dentro del auditorio, se subieron a la tarima los MC. Primero MC Ari de Cartagena y luego el bogotano N. Hardem, quien insistió en un mensaje de dar paz y amor en tiempos “tan jodidos”.

Minutos antes de las 8:00 p.m., la euforia fue aumentando a medida que una voz en off hacía la introducción a la larga y particular noche musical que venía. La promesa era que los artistas interpretarían por primera vez en Bogotá temas que la ciudad nunca había visto en vivo.

‘Fazeta’ salió primero solo a un Dj Set que le dio paso a ‘Gambeta’ y ‘Kaztro’, quienes estrenando atuendo, como es costumbre en sus presentaciones, provocaron júbilo en el público, que hacía el símbolo de las espadas de Alcolirykoz cruzando los brazos en el aire. A esa hora, quedaban menos de veinte boletas en las taquillas.

Mc Ari en la tarima del Teatro Jorge Eliécer Gaitán

Al inicio, los Alcolirykoz intercambiaron temas de sus álbumes Servicios Ambulatorioz y En letras mayúsculas, como era prometido, con samples de algunas de las tradicionales colombianas decembrinas como Tabaco y ron, en una dinámica constante de mezclar ambos mundos musicales. Sonaron Género rural, Testigos, Música para planchar, Házmelo rap, Acrobacias y Laura Ronda.

Haciendo énfasis en que era rap culebrero, revivieron no solamente las canciones sino los recuerdos, entre canción y canción. Anécdotas de la Medellín de finales de los 90, referencias al nadaísmo que tanto enriqueció sus letras, cuando apenas empezaban a componer los temas que revivieron este sábado.

“Hagan una bulla porque estamos tocando en un teatro. Esto en la puta vida", dijeron visiblemente emocionados por tener la oportunidad de presentarse en uno de los lugares insignia de la cultura de la capital. Desde el barrio Aranjuez de Medellín, llegaron a arrasar con la boletería del auditorio más grande de Bogotá.

En medio de la alegría, llegó la hora para El despilfarro, tema que le da el título a su EP de 2011, para el cual invitaron a un hombre y dos mujeres a la tarima a concursar quién podía rapear completa la canción, caracterizada por tener un beat en aceleración constante que implica un rapeo de gran dificultad. Ganaron ellas y se llevaron un disco.

N. Hardem en la tarima del Teatro Jorge Eliécer Gaitán

Luego siguieron otras como El malo de la película, mezcladas con decembrinas como Tan bella y presumida, para dar paso a La típica, cuya base rítmica justamente es el clásico de Rodolfo Aicardi, Cariñito.

Ya pasada hora y media, hicieron una pausa en la que a ‘Fazeta' se unieron Tito Agudelo en la trompeta y Byron López en la batería, para dar más cuerpo sonoro a temas como La noche, Clapzz, Changó y Erre con erre. Luego entró Fer Cely, guitarrista de esta familia en Bogotá, quien también es integrante de Los Rolling Ruanas, para lucirse en Normal, tal vez la segunda canción más popular de los Ninjazz, como se hacen llamar también Alcolirykoz y sus seguidores.

Sin tantas pausas para remarcar la importancia de este concierto para la agrupación y su historia en veinte años de carrera, la segunda ronda de canciones fue una descarga constante de energía, con los instrumentos a todo dar.

‘Gambeta’ siempre recordó al público que, de la A a la Z, son una familia gigante. Una que bailó y saltó en la canción de cierre, Tararea, a pesar del cansancio de dos horas y media de concierto.

La presentación de Alcolirykoz en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán fue una histórica para el hip hop colombiano. Una noche inolvidable, como dijo Gambeta.

Auditorio del Teatro Jorge Eliécer Gaitán, lleno

Fotos: Juan Santacruz