WASP 76-B

Hay un planeta donde llueve hierro

El universo esconde secretos y misterios que sobrepasan la imaginación y que pueden llegar a sorprender a los más experimentados científicos

¿Te imaginas un planeta donde todas las noches llueva hierro? ¡Pues sí, existe! Este exoplaneta es conocido por los astrónomos como WASP 76b

WASP 76-b se encuentra a 390 años luz de distancia de la Tierra. Es catalogado como un exoplaneta, porque gira alrededor de una estrella diferente al Sol. Este planeta es mucho más grande que Júpiter, y cuenta con unas características muy asombrosas y particulares, pues alberga dos temperaturas extremas: una tan caliente de día que es casi imposible de imaginar, a tal punto que llega a evaporar hierro, ya que alcanza los 2.400 grados Celsius y en la noche la temperatura cae hasta 1.500 grados.

Pero, la pregunta es entonces ¿Qué ocasiona la lluvia de hierro? Justamente esa lluvia del metal sale de la combinación y de la diferencia de las dos temperaturas extremas. La caída de la temperatura hace que el hierro en las nubes se condense y llueva hierro en la transición de la tarde a la noche.  Los expertos aseguran no haber visto esta lluvia al amanecer, sino solo al final del día. ¿Curioso no?

El descubrimiento de este exoplaneta, significa un ventaja para aprender más sobre la formación del sistema planetario, ¿Cómo es posible que un planeta del tamaño de Júpiter esté tan cerca de su estrella que casi se quema? La teoría dice que es más probable que los planetas como WASP 76-b se formen mucho más lejos de su estrella, más o menos como Júpiter, pero por alguna razón este planeta se ha acercado más a su estrella, lo que hace que produzca este fenómeno asombroso de precipitaciones de hierro. 

Seguramente al conocer esta información, muchos retornarán a la pregunta existencial ¿Esto qué significa para la humanidad? Pues de acuerdo con la experta Andrea Guzmán, estudiante de PhD en Astrofísica del Center for Space and Habitability de la Universidad de Berna, Suiza, quien adelanta una investigación para comprender la relación entre las atmósferas y el interior de los planetas que están fuera de nuestro Sistema Solar, nos hace repensar lo que sabemos en términos científicos o sobre lo que creíamos saber del funcionamiento de los planeta. 

“Estamos encontrando mucha diversidad física, química y en arquitecturas que en un momento eran impensables para nosotros los científicos. Estos hallazgos son también un llamado en general para los astrónomos, los científicos y la comunidad en general, para estar siempre abiertos de mente y recordarnos que hay una cantidad de mundos muy distintos al de nosotros, que son muy interesantes para descubrir, estudiar, pero también para pensar en que tan privilegiados somos nosotros de tener nuestro planeta tierra”. señala Guzmán. 

Y así es, según los expertos estudiar los otros planetas y exoplanetas tiene un gran objetivo y es entender mucho mejor la tierra y el origen de la raza humana dentro del sistema solar. Hasta la fecha los científicos han descubierto más de 4.000 exoplanetas  -se denomina así a los planetas que están por fuera del sistema solar-  como es el caso del recientemente descubierto WASP 76-b, semejante a Júpiter, pero de clima muy caliente cuando está de cara a su estrella principal.

“Una de las implicaciones de estos nuevos hallazgos es entender cuáles son esos procesos químicos, físicos y evolutivos que se están tomando fuera de nuestro sistema solar. ¿Por qué algunos de ellos no aplicaban a nosotros? y la pregunta siempre estará basada alrededor de ¿Si somos únicos o si hay vida en otras partes del universo y cómo la podemos detectar? Cada vez estamos un poco más cerca y hoy en día tenemos más acceso a tecnología y a nuevos instrumentos, como por ejemplo el telescopio espacial James Webb que será lanzado pronto y nos dará datos de alta calidad para seguir avanzando en entender procesos de formación evolutivos”, aclara Guzmán.

Hay alguien más que concuerda con Andrea Guzmán, ella es Julia Seidel, astrónoma alemana que trabaja en el Observatorio de Ginebra en Suiza y quien previamente estudió Física en el Imperial College  de Londres y en la Universidad de los Andes en Bogotá. Desde su posición nos incita a pensar que estos descubrimientos exoplanetarios son una oportunidad para llevar la imaginación hacia otras áreas del saber humano, como las artes. 

“Aparte de la satisfacción de la curiosidad humana, que chévere es un planeta con lluvia de hierro, es inspiración amplia para las artes. También podemos aprender más sobre nosotros, nuestro vecindario… Como, por ejemplo, de los planetas más próximos a nosotros: Marte y Júpiter. Pero también sobre las posibilidades de vida en el universo, ¿Quién sabe? quizás hay formas de vida que no necesitan agua, pero que tienen lluvia de hierro como el WASP 76-b, anota Seidel agregándo que “La búsqueda de exoplanetas responde a una de las preguntas existenciales de la humanidad ¿Estamos solos? o hay miles o millones de mundos como el nuestro y si existieran ¿Cómo se formó nuestra tierra exactamente con una configuración que permita la existencia de vida consciente como la nuestra?”, anota.

“Todas esas preguntas son fundamentales y merecen la curiosidad humana, y con un poco de suerte aprenderemos más sobre los ingredientes necesarios sobre las formas de vida en el universo”, concluye”.

Inspiración de la mujer en la ciencia 

Astrónomas: Andrea Guzmán y Julia Seidel

Las expertas consultadas sobre el WASP-76b son mujeres y en el Planetario de Bogotá se reconoce su labor y se exalta  más que el rol, la visibilización de la mujer en la ciencia ya que, a pesar de ser este un campo dominado por hombres, con el pasar del tiempo y gracias a los avances significativos en cuanto a la equidad de género, ellas han logrado adquirir iguales herramientas para desempeñar muy bien su papel dentro de esta área. 

Andrea Guzmán, es una destacada astrofísica colombiana para quien los retos son una oportunidad para avanzar profesionalmente. “Para nosotras encontrar estos retos como mujeres  en la ciencia, nos da la tremenda responsabilidad de tomar acciones y proponer iniciativas para ser las mentoras de las nuevas generaciones. De incluir a más mujeres, a más niñas a participar activamente en temas científicos, y dando respuesta en ese aspecto y con un grupo de colegas, también estudiantes colombianas del doctorado en el exterior, hemos decidido construir una sociedad más inclusiva y equitativa, y hemos creado una plataforma que se llama CHIA, -como la diosa de la Luna- Colombianas Haciendo Investigación en Astrociencias;  la idea de nosotras es recopilar el trabajo de las mujeres colombianas astrofísicas y astrónomas, mujeres que está haciendo astrociencia y construir una plataforma que nos facilite el acceso a recursos: información de becas, posiciones académicas etc.”, sostiene Guzmán.

A través de CHIA la idea, hasta el momento, es crear un espacio en el que estas mujeres puedan conocerse, discutir temas relevantes para la comunidad científica y convertirse en un ejemplo para las generaciones venideras.

La astrónoma  alemana Julia Seidel por su parte destaca el papel de la mujer en la astronomía, que ha sido importante si se compara  con otros campos de la ciencia ya que, según explica, ha estado presente desde el comienzo de la astronomía moderna, aunque casi nunca ha recibido el reconocimiento que merece por sus contribuciones.

“En los primeros observatorios que funcionaban con placas fotográficas, fueron las mujeres las que amenizaban las placas para encontrar nuevas galaxias, estrellas y meteoritos, también fueron ellas las que hicieron las programaciones en las primeras computadoras. Esos por supuesto fueron tiempos diferentes en los que no tenían las posibilidades de estudiar y avanzar como científicas, entonces se resignaron un poco a estos trabajos de ayuda. Afortunadamente las cosas ahora han cambiado, pero las niñas aún no se interesan tanto por las ciencias porque simplemente no hay muchos modelos contemporáneos a seguir, pero si ves a otra mujer avanzando en la ciencia, tú también puedes hacerlo, pero si no hay ninguna, es muy difícil imaginarse a las niñas en este camino de la vida”.

Para el Instituto Distrital de las Artes - Idartes y el Planetario de Bogotá es muy importante que, no sólo los especialistas en astronomía y otras ciencias, conozcan de estos temas, sino que todos los bogotanos se  acerquen un poco más a las estrellas. 

Por esta razón y como una más de las muchas novedades de Idartes se muda a tu casa este y todos los jueves a las 3:00 p.m., se realizaran los conversatorios Hablemos del Universo emitidos a través de las redes sociales del Planetario, donde se abordaran diversos temas sobre los misterios del universo de la mano de expertos científicos y astrónomos.

Por Lina Vásquez