Una oportunidad para crear contenido infantil

Hace siete años, en el barrio Santa Barbará de Bogotá, se comenzó a gestar una metodología de creación que involucraba a niños y niñas en edad preescolar. El resultado, encontrar en las sombras y las canciones un recurso maravilloso para desarrollar la imaginación de los más pequeños. Ese fue uno de los trabajos de Nicolás Rojas y su productora Caja de Colores, que más adelante se convirtió en ganador del Programa Distrital de Estímulos del Instituto Distrital de las Artes - Idartes.  

“En ese trabajo de co-creación encontramos en el teatro de sombras un recurso maravilloso para el trabajo con niños pequeños porque no es como los dibujos animados que dan un fondo y una forma a los personajes y los detalles, sino que permiten solamente tener una silueta y hacer que a través de la imaginación se complete el resto de la historia”, explica Nicolás, quien tiene más de 12 años de experiencia en la creación para la primera infancia.

Pero fue en el año 2019 cuando Nicolás resultó ganador de la Beca de creación de repertorios sonoros del Idartes, una convocatoria que fomenta la realización de un laboratorio de creación con la participación de niñas y niños en primera infancia, artistas, padres, madres y cuidadores. Su proyecto de creación de cantos y cuentos, que luego se convirtió en un recital, fue desarrollado con estudiantes en jardines infantiles de la Secretaría de Integración Social de Bogotá.  

El proyecto ganador fue un grupo de canciones creadas a partir de la producción gráfica de los niños y las niñas; un trabajo de composición con papeles, dibujos y juegos que suscitaron a partir de la creación de personajes que en su mayoría estuvieron relacionados con monstruos debido a que, en el proceso de exploración, Nicolás y su Caja de Colores identificaron esa fascinación por parte de los pequeños que acompañaban este laboratorio. De allí, la construcción de canciones como Yo quiero un hijo verde, que habla sobre los deseos de una mamá monstruo.

Para el productor musical, cineasta y docente, la clave de crear un producto para la primera infancia es reconocer sus necesidades actuales. “Se trata de desprendernos del niño que fuimos y conectarnos con los niños de hoy, eso es una cosa difícil y un reto, pero debemos construir pensando a partir del reconocimiento”, dice Nicolás, al tiempo que señala la importancia de seguir explorando en temas de la realidad actual del mundo: “no se trata de hablarles únicamente del osito goloso que fue por miel a la colmena y una abeja lo picó, también debemos hablar sobre el mundo y eso se puede hacer con metáforas como en El Principito, o  a través de la creación artística con contenidos lindos para ellos”.

En esa misma línea, León David Cobo considera que las niñas y los niños en etapa de desarrollo requieren productos pensados especialmente para ellos, desde el punto de vista de sus procesos de desarrollo y crecimiento. “Nuestro proyecto se inscribe en el sonido como una forma de descubrir el mundo, como una manera de aproximarse a la exploración del entorno desde la posibilidad de escuchar el universo en la vida cotidiana. Es una propuesta pensada para niños y niñas desde los lenguajes de expresión artística, en este caso del paisaje sonoro y canciones que invitan al juego, el descubrimiento y la fantasía”, explica.

Para León David, lo más importante para tener en cuenta al momento de hacer una producción para la primera infancia es escuchar a los niños y las niñas en estas edades e identificar cómo se va desarrollando el sentido del oído. Se trata, según indica, de ponerse en el lugar de los pequeños a la hora de escuchar, explorar, indagar y generar una investigación alrededor de la escucha de la primera infancia que no es lo mismo que la escucha de los adultos que ya tienen formado sus oídos. Además, es fundamental escoger muy bien los contenidos musicales y sonoros que estimulen propongan y generen desde el juego la exploración del universo sonoro.

“Esta convocatoria posibilita en tiempos de pandemia la creación de contenidos para la primera infancia tanto desde la cofinanciación como desde el apoyo logístico y la divulgación del proyecto que, en mi caso, se realizó con una instalación sonora. Además, conté con todo el apoyo para la producción y la posproducción de un proyecto que requiere muchos medios técnicos, conceptuales, pedagógicos y administrativos para, finalmente, poder hacer un contenido con las mejores condiciones para las niñas y los niños de la ciudad”, celebra León David Cobo, ganador de la Beca de creación de repertorios sonoros para la primera infancia, en el año 2019.

Ahora, como parte de la oferta dirigida a la primera infancia en el Programa Distrital de Estímulos del Idartes, los artistas, creadores, formadores, escritores, ilustradores e incluso las editoriales y productoras de la ciudad, pueden participar en la Beca de creación de libro digital interactivo, una convocatoria que invita a crear un producto dirigido a niñas y niños con edades entre los tres y los cinco años, con temática libre y de distribución gratuita. Se entregará un estímulo de 15 millones de pesos y las postulaciones están abiertas en este enlace hasta el 31 de mayo.